«Sé tú mismo. El resto de papeles ya están ocupados»
No sé si te has pensado alguna vez si quieres conseguir llevar la vida a tu gusto.
Tal y como te gustaría, imaginar que sea así, como en tus sueños o incluso ver que puede salir mejor.
¿Qué quieres en tu vida?
¿Quieres vivir o solo sobrevivir? ¿Quieres ser o parecer? ¿Qué eliges? ¿Dónde está tu verdad?
Vivimos la vida muy deprisa. Llenamos nuestras vidas de muchas tareas y muy a menudo sin darnos cuenta que a veces incluso no tenemos tiempo de vivir de verdad.
¿Por qué nos gusta tanto sufrir?
Parece una paradoja un poco.
La vida es más maravillosa de lo que puede parecer.
Tú sabrás si has “despertado” de verdad esta mañana. ¿Estás haciendo algo que te gustaría hacer de verdad?
¿Para qué necesitamos las máscaras?
¿Sabes porque nos gustan las máscaras?
Nos dan la sensación de protección, de un escudo invisible, que nos aleja de nuestra verdad. Este escudo es totalmente falso.
Yo también he vivido mucho con mi mascara para tratar de encajar, para que otros me acepten, buscando una aprobación, tenía miedos. No sabía que iba por el camino equivocado. Parecía que estaba bien. Pero no, algo en mi interior no estaba bien, quería hablar, quería salir, buscaba una salida.
Esa era yo hace años. Ahora mi situación ha cambiado, me siento más libre.
Segura, se lo que quiero en la vida con más decisión.
Bueno, soy humana también tengo mis dudas y algunos días de bajón.
¿Quién no los tiene? Que levante la mano. Vaya, casi no veo ninguna.
Hasta que me paso el otro día, pero ya sé cómo recuperarme.
Me conozco cada día mejor y mejor.
¿Es posible vivir sin mascara?
La vida es muy corta.
¿Por qué la tenemos que vivir con la máscara?
Dar poder a otros que deciden.
Solo tú puedes decidir, dar sentido y tus propios significados a las cosas y situaciones de cada día.
Poder amarte tal y como eres.
Vulnerable, a veces tímida, ansiosa, con miedos, con dudas, con sus rarezas, pero ser tú.
Saber vivir.
Saber saborear.
Saber amar.
La vida estaría mucho más bonita, más auténtica.
Quiero que te pongas una de las máscaras aunque sea jugando.
Pero que ese juego no dure toda la vida.
Que sea durante un baile, o una fiesta o un carnaval.
Diviértete, pásalo en grande y vuelve a ser tú.
¡Así eres mucho más hermosa!
¿Cuándo podemos entender que vivimos sin mascara?
Empezamos a sentirnos mejor, más libres, ligeros, no tener que esforzarnos, de gustar a todos, pretender, hablar de algo que solo gusta a los demás.
Tal vez no lo consigas hacer todos los días. Si un día te das cuenta que llevas una máscara ya es un gran paso.
¿Quieres más dolor en tu vida? ¿Cuándo es suficiente? Empieza vivir, permítete ser honesta, contigo misma.
Enamórate de ti y de tu vida.
Amor es una fuerza bella e invisible que hace posible la magia de la vida.
Lo más difícil es ver con claridad.
Coger un espejo y decidir verse a sí mismo.
Allí empieza la verdadera historia, cuando nos quitamos la máscara.
Pero cuando nos quieren hacen daño y sentimos miedo, la buscamos otra vez.
Si me ayudo antes pues la usare otra vez, y así me encuentro nuevamente a salvo.
Qué barbaridad parece un círculo sin salida.
No lo es. Lo que necesitamos es la valentía a enfrentarnos a nuestros miedos, ser auténticos e imperfectos, a veces lentos a veces más rápidos sin pensar demasiado, a veces locos por fuera, pero sabios por dentro.
Imagina un árbol.
Es importante tener un raíz y después tú decides a donde van las ramas.
Y si las cuidas bien un día te darán las flores y con tiempo veras los frutos.
Y si los recoges en el tiempo adecuado podrás a disfrutar de su auténtico sabor: rico, jugoso, ni dulce ni amargo justo en su punto. Este será tu sabor de la vida.
De ti depende si lo quieres cultivar tu propia “fruta” y a lo mejor a tu familia o tus amigos no le gusta la misma fruta.
O incluso pasará que algunos amigos no te entenderán del todo.
No es fácil pero la vida cambia y tú junto con ella.
Comprender lo que somos nos libera.
Lo más importante en este proceso de transformación desde principio es el amor a ti mismo y la aceptación.
Eres ser único y valioso solo por la única razón, por estar aquí, tener la oportunidad de disfrutar de esta vida en este cuerpo y nadie te puede arrebatar tu derecho a ser autentico.
Solo de ti depende si quieres descubrirlo, verlo, sentirlo, permitirlo en tu vida.
Enamorarte de ti, de tus virtudes y defectos, de tus emociones, de tus pensamientos, de tus talentos y pasar a la acción con amor.
Solo allí encontraras la verdad, tu esencia.
Si alguna vez te sientes mal contigo mismo, busca en lo más profundo de tu ser, date cuenta que nadie es perfecto, tampoco tú, pero aun con todos los defectos y cualidades, eres una persona única en el universo, por eso eres especial.
Solo tú decides cuando llega el momento de quitar la máscara. ¿Te atreves?
«No tenía ni idea de que ser yo misma me haría ser tan rica como he llegado a ser. Si lo hubiera sabido, lo habría hecho mucho antes». – Oprah Winfrey
Si te gusto mi post, compartelo con las personas que les puede servir de ayuda.
Te espero en la sección de comentarios.
Un abrazo,
Elena
Si te interesa saber más sobre el tema, resolver tus preocupaciones o necesitas algún tipo de ayuda, ponte en contacto conmigo por aquí. Te acompañare hacia tus objetivos con más claridad y mejor enfoque.
Sígueme en las redes, allí público más novedades y cosas interesantes durante la semana. Facebook: @WellnessRouting Twitter: @WellnessRouting Instagram: aledjina
Hola Elena:
«Comprender lo que somos nos libera». Te cito porque me parece una de las frases más auténticas y útiles que he leído en estos días. Como emprendedora dispuesta a dar el salto, dejando detrás la seguridad de un trabajo fijo, me veo enfrentando mi yo independiente y autónomo con la visión de la vida de otras personas: mi madre, algunos de mis conocidos y, a veces, esa batalla es dura porque quiero ser yo misma pero no quiero causar preocupación en mi entorno. ¿Cómo quitarse la máscara de la seguridad y admitir, con una sonrisa, que soy así, independiente, un espíritu libre y que ningún trabajo fijo me va a hacer feliz? Pues hasta ahora me ponía a la defensiva, como si tuviese que justificarme, pero entiendo que es mejor asumir que esta es mi personalidad, esta, mi vida y estos, mis valores. Quitarse la máscara puede ser duro (para los demás y para uno mismo), pero puede que no haya otro camino que comprenderse y aceptarse.
Gracias por compartir esa parte de tu historia personal María. A lo largo de la vida es muy necesario que revisamos nuestros valores, que pueden cambiar después de años. Especialmente cuando nos enfrentamos a un cambio. La seguridad es una de las necesidades muy importantes de ser humano y todos la necesitamos en diferentes cantidades para cada uno. La cuestión como lo vamos a cubrir, haciendo un trabajo para alguien o cumpliendo algún otro plan personal. Cuando quieres quitar la máscara y ser tal y como eres ahora habrá gente que no lo va a entender y eso duro de aceptar. La gente cercana a ti necesita saber tus necesidades y tus valores. Imagínate cuando tu familia sabe que tú te sientes feliz es maravilloso verdad. Yo conocía casos que algunas amistades no podían seguir y tenían que por un tiempo dejar de comunicarse. Aunque unos años después recuperaron su amistad de manera inesperada.
Elena nos colocamos mascaras porque a muchos desde pequeños nos han hecho creer que nuestra autenticidad no era válida, muchas veces cuestionaron nuestro comportamiento y quisimos que nos aprobaran cuando en realidad solo queríamos que nos aceptaran tal como éramos. Pero llega la madurez y te das cuenta que por mucho tiempo has usado mascaras, y es cuando decides ir quitándote de a poco tanto maquillaje, ornamento y todo lo que cubría tus emociones y forma de ser, comienzas a conquistarte a ti mismo y empiezas a disolver ese traje pesado que no te corresponde y es cuando llegas a ese tú tan maravilloso y genuino y disfrutas el dulce jugo, como lo has mencionado, de tu verdadera personalidad, profundidad y esencia.
Un gran post de encuentro personal.
Muchísimas gracias Eliana por tu comentario. Es maravilloso cuando sentimos que estamos despiertos de verdad o no vivimos cumpliendo los deseos de otros, estamos viviendo nuestro encuentro personal, me encanta como lo llamaste. Yo personalmente respeto las personas que lo han pasado en sus vidas. Son valientes e inconformistas. Al final que obteniendo la libertad interior se nos hace más fácil liberarse de las apariencias. un gran abrazo guapa.
Usamos máscaras porque en ocasiones creemos que necesitamos protegernos, especialmente cuando somos niños y entonces sucede que nos acostumbramos a llevarlas siempre, y luego ya no sabemos identificar que es máscara y que no. Por eso debemos conocernos y saber como somos y que nos gusta, para entonces y sólo entonces darnos cuenta de las máscaras que usamos y cuando las usamos. Ese es ya un gran paso para empezar a ser auténticas y libres y ser quienes somos sin importarnos gustar a los demás y quedar bien con todos. Qué liberación no usar máscaras y poder ser auténticas!
Un abrazo
Hola Odina, muchísimas gracias por tu aportación. En cuando crecemos y somos personas adultas totalmente de acuerdo necesitamos pasar por ese proceso y para todos es bastante doloroso. Pienso que lo más importante es una vez al descubrir y darnos cuenta de las máscaras necesitamos seguir en el camino de esa liberación y transformación. Puede ser largo e incluso podemos necesitar ayuda. Pero una vez en el camino sabes que ha merecido muchísimo la pena. El camino de autoconocimiento es apasionante. Me alegra verte por aquí. Un abrazo.
Vivir de apariencias no ayuda en nada. Yo por mucho tiempo llevaba una máscara que no me pertenecía, desde que comprendí que nunca le voy agradar a tu mundo vivo más plena y feliz.
Bonita reflexión.
Saludos.
Qué bueno Alexandra! Me alegro mucho que estas en esta etapa. Agradar a todos puede causar nos un estrés enorme. Cuando puedes vivir la vida tal y como lo quieres de verdad es maravilloso. Un abrazo muy grande.
Ser auténticos y perfectos, me ha gustado mucho esa parte, porque la verdad aprender a vivir sin miedos o al menos enfrentarnos a ellos sería maravilloso, tendríamos una vida desde luego más genuina y auténtica, que no más sencilla porque eso sería complicado, pero podría ser el camino para ser un poquito más felices, porque la carga iría reduciendo, esa donde nos ponemos máscaras, donde somos otra persona, agota y nos quita un pedacito de nosotros cada vez :/
Genial reflexión guapa, me ha gustado mucho tu post 🙂
Muchísimas gracias Diana. Me alegra mucho que te guste. No podemos vivir nuestra vida sin miedos, pero si podemos actuar a pesar de tenerlos. Siendo tal y como somos nos permitimos ser un poco más vulnerables, no débiles, solamente enseñamos un poco más nuestra fragilidad. Si queremos llorar lloramos, si queremos sonreír, sonreímos, si queremos ayudar, ayudamos, compartimos y viajamos en este camino hacia nuestra felicidad. Un abrazo bonita.
No se usar las mascaras, aunque creo que inconscientemente algunas veces nos la ponemos, ya sea por protegernos o por aparentar algo, me imagino que la mayoría de la gente van bien enmascarados, ya que no se termina de conocer a nadie, cada uno nos da cada sorpresa que nos quedamos sorprendidos de que que se quiten la mascara cuando menos lo esperamos.
Te felicito guapa, que no las ha conocido y no has usado, es mejor vivir así honestamente. Tienes mucha razón a veces podemos recibir unas sorpresas inesperadas. Conocernos mejor a nosotros mismos nos puede ayudar mucho a descubrir algunas cosas que desconocíamos. un abrazo.
Todos en algun momento usamos mascaras, es dificil no hacerlo. Pero lo ideal seria todo sin ella. Pero tambien causariamos mucho dolor y aunque no queramos somos parte de la sociedad, me gusto tu articulo. Que tengas exito.
Gracias por tu comentario Blanca. Si es a veces complicado ver la mejor manera de actuar, hacemos cosas por inercia, nuestro subconsciente nos guia sin que nos demos cuenta. Ojala siempre pudieramos hacer las cosas que de verdad nos dice el corazon. un abrazo.